sábado, 22 de septiembre de 2012

reumatismo


Reuma, es un término genérico que abarca una serie de alteraciones dolorosas de los tejidos de las articulaciones y de la musculatura.
Esta enfermedad está ligada siempre a inflamaciones, la cual puede ser aguda o crónica. La movilidad es limitada por el dolor y puede llegar a producir la invalidez.
La mayoría de las personas reumáticas, ya desde su niñez, se muestran como individuos muy activos y con una extraordinaria movilidad. Esto los lleva a practicar deportes de gran esfuerzo y competición, o a realizar muchos trabajos en su casa, en su jardín, etc. Lo que sirve, indirectamente, para desviar sus fuertes impulsos agresivos.
Tanta actividad exterior no es más que para compensar su inmovilidad interior, su terquedad y su rigidez, ya que estas personas, en general, intentan dominar sus emociones (enfado-ira-frustración-amargura-rencor) completamente, lo que le impide llevar una vida normal y saludable.
Por el contrario, la represión de todas sus emociones y, fundamentalmente, su agresividad no manifestada, su egoísmo, su inflexibilidad, su deseo de controlar, saber o dominar, se instala en su cuerpo provocando procesos inflamatorios que más tarde desencadenan su deformación y anquilosamiento.
El reuma también expresa resentimiento por no sentirse querido ni apreciado, por sentirse víctima.
Sentimiento de culpabilidad por las agresiones no realizadas que compensa con su generosidad y servicio hacia los demás.
Falta de confianza y de autovaloración.
Gran tendencia a la crítica.
Miedo o rechazo a los cambios de dirección o de estado. "Gran desvalorización referente a la estructura". Gran desvalorización de uno mismo. "No soy capaz de hacerlo, soportarlo", "es demasiado para mi". "No me equiparo a nada, no valgo nada en el fondo de mi mismo". "Desvalorización en relación al gesto" puesto que permite la fluidez de éste. Para que se produzca una revalorización..."para valorarme tengo que ser diferente que antes".
Recomendaciones para recuperar la salud física, emocional y espiritual:
Ayuno consciente. Asimilar los problemas que no se han digerido. Desplazar la movilidad del exterior al interior.
Expresar calor hacia sí mismo y hacia los demás.
Expulsar la agresividad reprimida hacia el exterior de forma consciente.
Completar el pasado y atreverse a perdonar y olvidar.

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